Y acabamos acostumbrándonos a nosotros mismos, dejando de lado la precaución de perdernos en otros caminos, en otra gente.
Di puerta a la nostalgia,
pero volvió (con-tigo)
y aquí esta (con-migo)
recordándome la línea de dos,
la que empezaba por tí (siempre por tí)
y acababa por mí.
Y teniendo presente el triángulo que formaste más tarde sin preguntar,
(te) me has perdido acostumbrándote a tenerme.
Te he guardado los te quieros que me dijiste para que se los des a la nueva y así no perder las manías que me pegaste. (Desde el primer día)
Di puerta a la nostalgia,
pero volvió (con-tigo)
y aquí esta (con-migo)
recordándome la línea de dos,
la que empezaba por tí (siempre por tí)
y acababa por mí.
Y teniendo presente el triángulo que formaste más tarde sin preguntar,
(te) me has perdido acostumbrándote a tenerme.
Te he guardado los te quieros que me dijiste para que se los des a la nueva y así no perder las manías que me pegaste. (Desde el primer día)
No hay comentarios:
Publicar un comentario